Dejar de fumar: el comienzo de una vida nueva

Es evidente que el tabaco es perjudicial para la salud, pero también es cierto que dejar de fumar no es un hecho que sea fácil de realizar. Como cada año, uno de los propósitos más habituales, junto con hacer deporte o seguir una alimentación más saludable, es dejar de fumar. Una de las mejores medidas para proteger nuestra salud y la de los que están a nuestro alrededor. En este artículo te contamos los efectos que tiene el tabaco en nuestro salud y te damos una serie de consejos para dejar de fumar y emprender el comienzo de una vida nueva.

Según los datos recogidos por la Asociación Española Contra el Cáncer, cada año, más de 8 millones de personas, en todo el mundo, fallecen a causa del tabaco; 7 millones lo hacen por consumo directo y alrededor de otro millón muere sin haber encendido un cigarro en su vida. Además, en España, un país donde el 22% de la población sigue siendo fumadora, el tabaco mata cada año a más de 50.000 personas.

Dejar de fumar: el comienzo de una vida nueva

Muchas personas no dejan de fumar porque lo consideran un hecho demasiado difícil y es cierto que para la mayoría de las personas no es algo sencillo. La nicotina de los cigarrillos es una droga sumamente adictiva, pero con el enfoque adecuado, es posible superar las ganas de fumar.

Los beneficios de dejar de fumar son numerosos y comienzan desde el primer minuto del abandono del hábito. Según la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), el tabaquismo es una enfermedad crónica que afecta a cerca del 25% de la población general española mayor de 15 años de edad y es causante de un gran número de enfermedades. De hecho, el tabaco es el mayor factor de riesgo en el cáncer y los datos son concluyentes:

Uno de cada tres casos de cáncer está relacionado con el tabaco, ya sea en personas que fuman o han fumado o en aquellas que han estado expuestas al humo ambiental del tabaco.
Hasta 16 tipos distintos de cáncer están asociados a este factor de riesgo
El tabaco es el causante de más del 80% de casos de cáncer de pulmón y laringe, pero también de entre el 30% y el 50% de casos de cáncer de vejiga, orofaringe, esófago o boca.

Cómo influye el tabaco en nuestro ADN

Un estudio realizado por la AECC muestra que el ADN, presente en todas nuestras células se daña incluso al fumar un solo cigarro. El efecto del tabaco en los pulmones se debe a que el humo del tabaco libera más de 5.000 químicos, muchos de los cuales son perjudiciales. Se conoce que al menos 70 pueden causar cáncer (carcinógenos). Dichos químicos entran en nuestros pulmones y se dispersan por todo el cuerpo. El daño constante del ADN en la misma célula es lo que lleva a que se vuelva cancerosa, proliferando descontroladamente y dando lugar a un tumor. Existen varias formas en las que el tabaquismo influye en este proceso favoreciendo la aparición del cáncer:

Los carcinógenos presentes en el tabaco se unen al ADN, formando lo que se conoce como un «aducto de ADN». Cuando el ADN tiene uno de estos carcinógenos pegado, no puede replicarse de manera normal, proceso necesario para que las células se dividan de forma correcta. Esto provoca problemas en el material genético.
Se ha observado que el tabaco favorece la aparición de mutaciones en ciertos genes clave para controlar cómo las células de nuestro organismo se proliferan.
El ADN es el manual de instrucciones de nuestras células, por lo que preservarlo intacto es primordial. Por ello, disponemos de sistemas que permiten que nuestras células, cuando detectan que el ADN está dañado, lo reparen antes de replicarlo o dividirse. Desafortunadamente, los químicos presentes en el tabaco también interfieren y dificultan que nuestras células puedan reparar el ADN dañado.

Por todos estos motivos, dejar de fumar sigue siendo la única estrategia probada para reducir los procesos que dan lugar al desarrollo de algunos de los tipos de cáncer enumerados anteriormente.

Cómo nos afecta el tabaco

Como hemos visto, el tabaco puede afectarnos de diferentes maneras. No solo es cuestión de luchar contra la nicotina. Es importante insistir en que no solo es nocivo fumar, sino también estar expuesto, aunque sea de forma involuntaria, al humo del tabaco. De igual manera es importante recordar que los nuevos dispositivos, tales como vapeadores, pipas de agua o cigarrillos electrónicos, no son inofensivos ni para quienes lo consumen, ni para las personas que están alrededor. El aerosol de estos dispositivos contiene sustancias tóxicas que pueden generar cáncer. Asimismo, algunos conllevan un consumo dual (tabaco y dispositivos electrónicos de liberación de nicotina) que perduran la adicción desde un punto de vista psicológico.

El efecto inmediato que se produce en tu salud al dejar de fumar

Son muchos los efectos negativos que el tabaco produce sobre nuestra salud. Sin embargo, prácticamente, desde el primer instante en que empezamos a dejar de fumar empezamos a sentir mejoras. A las pocas semanas, la función pulmonar aumenta y la circulación sanguínea mejora. Al año, el riesgo de infarto cardíaco se reduce drásticamente y a los 15 años de abandonar el consumo de tabaco, el riesgo de sufrir una cardiopatía es el mismo que el de una persona que no ha fumado nunca. Además, dejar de fumar antes de los 40 años reduce al 90% el riesgo de mortalidad por causas asociadas al consumo del tabaco.

Dejar de fumar protege tu salud y la de los que están a tu alrededor

Los efectos dañinos del tabaco no solo afectan a las personas que lo consumen, sino también a aquellas que están expuestas a su humo. El humo ambiental del tabaco es generado por el propio cigarrillo en combustión junto con el humo exhalado por la persona fumadora. Sin embargo, también existe el humo de tercera mano, que son los residuos de nicotina y sustancias químicas que se adhieren a todas las superficies (ropa, cabello, muebles, cortinas, paredes, etc.).

La evidencia científica señala que, en los hogares en los que se consume tabaco, se pueden encontrar concentraciones de nicotina perjudiciales para la salud, aun en las zonas en los que nadie haya fumado. Por lo que si dejamos de fumar, estaremos protegiendo también la salud de las personas con las que convivimos, especialmente si son menores, ya que son más vulnerables a los efectos del humo ambiental.

¿Estás preparado para dejar de fumar?

Si has llegado hasta aquí, lo primero es felicitarte. Leer este artículo ya es un gran avance para abandonar de una vez por todas el consumo del tabaco. Como ya sabes, dejar de fumar no es un camino especialmente fácil, pero no te desanimes, muchas personas han conseguido superarlo y tú también podrás. Para ello, te proponemos seguir estos consejos que te ayudarán a dejar de fumar y dar comienzo a tu nueva vida: